Otro año que se nos va, y otro nuevo que tenemos en puertas. Sin que nos demos cuentas estamos ya comiendo turrón, diciendo HO HO HO y con la nariz roja del anisillo. Aprovecho esta ventana para dar las gracias a todos los grupos de discapacidad - diversidad funcional- que pasan por el punto Vuela Fuente Palmera. Gracias a los chavales, a los monitores, a los familiares, a los profesionales que acompañan a los mismos... la experiencia de compartir ratito con todos es un lujo; el calor que transmiten, la ilusión, la amistad, las anécdotas, la humanidad,... es algo que no me gustaría perder en un trabajo en el que cuando hay saturación de atención al público es fácil sufrir la deshumanizacion (estrés, bornout).
Gracias a los chavales de IEMAKAIE por la tarjeta de felicitación navideña, me ha encantado. Y gracias a los mayores y sus monitoras del centro Santa Magdalena por sus visitas de los últimos meses.
Este año además, a nivel personal y gracias a la experiencia con estos grupos, he podido obtener titulación relacionada con la integración social, de la cual me siento muy orgulloso. Espero me pueda servir para afrontar nuevos retos con estos y otros grupos tan amenos.